Evangelio del 14 de marzo. Jueves 1º de Cuaresma.

Lectura del Evangelio según Mateo 

Mt 7,7-12

«Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. 

¿O hay acaso alguno entre vosotros que al hijo que le pide pan le dé una piedra; o si le pide un pez, le dé una culebra? Si, pues, vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que se las pidan!

Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas.»

Si vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que se las pidan!

Para Jesús es absurda la idea de un Dios sordo a sus hijos; le parece ridículo hacerle inferior en amor y ternura a nuestros papás o mamás. Jesús habla frecuentemente en términos muy parecidos a estos: No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí (Jn 14 1). ¿Por qué estáis con tanto miedo? ¿Cómo no tenéis fe? (Mc 4, 40). Si a la hierba del campo, que hoy es y mañana se echa al horno, Dios así la viste, ¿no lo hará mucho más con vosotros, hombres de poca fe? (Mt 6, 30).

¿Qué tal si intentamos imaginar cómo será nuestra vida el día en que asimilemos perfectamente este anhelo de Jesús? Será maravilloso, fantástico, espléndido; será, como dice Pablo, el gozo pleno de la gloriosa libertad de los hijos de Dios (Rm 8, 21). Esto ha sido escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo tengáis vida en su nombre (Jn 20, 31). Cantad y salmodiad en vuestro corazón al Señor, dando gracias siempre y por todo a Dios Padre, en nombre de nuestro Señor Jesucristo (Ef 5, 20). Santa Teresita se expresa así: Ante un lenguaje como éste, sólo cabe callar y llorar de agradecimiento y amor. Y santa Teresa: ¡Qué señorío tiene un alma que el Señor llega aquí, que lo mire todo sin estar enredada en ello!

La fe en el Dios de Jesús, en el Dios que es Jesús, en el Dios-Amor, amor incondicional y gratuito, es garantía de vida de plenitud.

Parroquia de Nuestra Señora del Carmen y Santa Teresa

Santander Cantabria

España 

Fuentes: EL SITIO WEB OFICIAL DE LOS CARMELITAS

               Meditación con el Evangelio del día. Buena Noticia.