lunes, 23 de septiembre de 2019

Evangelio del 23 de septiembre. San Pío de Pietrelcina.

 

Lectura del Evangelio según Lucas 

Lc 8,16-18


«Nadie enciende una lámpara y la tapa con una vasija, o la pone debajo de un lecho, sino que la pone sobre un candelero, para que los que entren vean la luz. Pues nada hay oculto que no quede manifiesto, y nada secreto que no venga a ser conocido y descubierto. Mirad, pues, cómo oís; porque al que tenga, se le dará; y al que no tenga, aun lo que crea tener se le quitará.»


Nadie enciende una lámpara y la tapa con una vasija, o la pone debajo de un lecho, sino que la pone sobre el candelero, para que los que entren vean la luz.
Los creyentes estamos dotados de la luz de la fe en el Evangelio. Es una luz maravillosa; tan intensa como discreta. Es una luz que llena de sentido la vida del creyente. Los creyentes la disfrutamos y la agradecemos, porque a vosotros se os ha dado el conocer los misterios del Reino de Dios; a los demás sólo en parábolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan (Lc 8, 10). Los que entren, porque han sido entrados ven la luz; los que no entren, porque no han sido entrados, percibirán un ligero resplandor, pero continuarán moviéndose en la oscuridad.

Estamos llamados a ser luminarias: Vosotros sois la luz del mundo (Mt 5, 14). Como Él: Yo soy la luz del mundo (Jn 8, 12). Luz tan intensa como discreta. Su resplandor no hería los ojos de nadie. La fe es luz porque es el camino mejor para alcanzar el gozo interior, la libertad, la experiencia de plenitud. Así lo dijo Él: Os he dicho estas cosas para que mi alegría esté dentro de vosotros y vuestra alegría sea completa (Jn 15, 11).

¿Quizá nos desalentamos porque nuestra luz no es percibida por personas cercanas y queridas? Él nunca se desalentó a pesar de que la mayoría de sus paisanos continuaron con sus vidas de siempre como si fuesen todos ellos ciegos. La fe nos llena de confianza y de seguridad; nos hace ver que Dios está al comienzo y al final de todo. Porque todo fue creado por Él y para Él (subrayemos fuerte el TODO) (Col 1, 16).


Parroquia de Nuestra Señora del Carmen y Santa Teresa
Santander Cantabria
España 


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